En este espacio abordamos el presente mismo de cada encuentro, posibilitando desprogramar lo que restringe la consciencia plena de sí; a través de la psicoenergética del cuerpo, la música, el movimiento, la risa, la teatralización, el silencio, y la palabra viva. Así creamos el campo terapéutico en el ámbito del alma grupal donde operan las verdaderas transformaciones individuales.

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Destaca esta propuesta la integración del humor, la risa y el juego como herramientas de transformación en el proceso terapéutico, lo cual resulta un aporte original al campo de la Psicoterapia grupal.